Escrito por hector luis manchini  
Sábado, 11 de Junio de 2022 18:21
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Llegué a Zapala en marzo de 1980 habiendo ganado el concurso para un cargo de secretario en el Poder Judicial neuquino.

Acostumbrado a trabajar del otro lado del mostrador como un abogado libre los primeros días pasaron lentamente mas afortunadamente me encontré con compañeros de primera calidad y así sin darme cuenta la vida se fue convirtiendo en un torbellino, días, meses y años pasaron con prisa.

El interior del interior me permitió poder estudiar y resolver casos de variada temática que diferían por la influencia que les daba el lugar o jurisdicción en que sucedía.

Así Zapala, Cutral Co, Junín y San Martín de los Andes o Villa La Angostura marcaban diferencias sustanciales en la manera o el fondo de los distintos supuestos que llegaban a mi conocimiento y decisión.

Fue una experiencia relevante escribir en las distintas revistas jurídicas a la vez que el diario Río Negro me dió el espacio para escribir mis cartas donde dejé y dejo constancia de los sucesos locales y nacionales de mayor relevancia, opiniones compartidas por lectores inquietos.

Mis hijos, muy niños cuando llegué a Neuquén, hoy son hombres que tienen toda una vida por delante. 

El suscripto se ha convertido en un adulto mayor que se pregunta como se instalaron las canas en su cabello hoy totalmente blanco, el caminar se hizo algo más lento, mas la mente sigue intensa, inquieta y persistente en dibujar cada día esa misiva en que dejo constancia de los sucesos que aparecen trascendentes y así será hasta que llegue el día en que me reencuentre con mis viejos, los amigos que ya partieron esto es el día en que mi tiempo se acabe.

Última actualización el Sábado, 11 de Junio de 2022 18:49